Reapareció el colgante de miles de dólares inspirado en 007 que había desaparecido durante un robo

La policía de Nueva Zelanda recuperó un colgante inspirado en la saga del agente 007, valuado en miles de dólares, que un hombre presuntamente se había tragado a fines de noviembre durante un robo local.

Las autoridades neozelandesas anunciaron que el 4 de diciembre por la noche lograron recobrar la pieza de joyería. “Se recuperó el colgante. Ahora se encuentra bajo custodia policial“, aclararon mediante un comunicado.

Con respecto a las circunstancias de la reaparición del valioso objeto, la policía aseveró que el presunto autor del hecho delictivo expulsó el colgante de su cuerpo de manera natural, a través de su tracto gastrointestinal, mientras permanecía detenido bajo prisión preventiva, según la agencia de noticias estadounidense Associated Press (AP).

“Cuando lo arrestaron, se le realizó una evaluación médica y se le asignó un agente para que lo vigilara constantemente“, declaró el inspector Grae Anderson en un comunicado, citado por AP.

El sospechoso del caso fue acusado formalmente de haber robado la valiosa pieza el 28 de noviembre de una joyería de Auckland llamada Partridge Jewelers, de acuerdo con el mismo medio.

Aquel día, según documentos judiciales citados por la cadena local Radio New Zealand (RNZ), este hombre de 32 años presuntamente agarró en la tienda un valioso colgante de 33 mil dólares neozelandeses (aprox. 19 mil dólares estadounidenses), conocido como “Special Edition Guilloché Enamel Octopussy Surprise Locket”, y se lo tragó para intentar robárselo.

Poco tiempo después, agentes de la policía arribaron al lugar y detuvieron al sospechoso dentro de la joyería.

Por su parte, el acusado del hecho delictivo, quien continúa detenido, se declaró inocente de una serie de cargos en su contra durante una audiencia ante el Tribunal de Distrito de Auckland, de acuerdo con RNZ. Su próxima cita con la justicia está pactada para febrero.

El objeto del incidente es un colgante de la histórica marca de joyas de lujo Casa Fabergé, fundada por el joyero ruso Gustav Fabergé (1814-1894).

La firma alcanzó fama internacional a finales del siglo XIX y principios del XX, cuando su hijo, el reconocido orfebre Peter Carl Fabergé (1846-1920), creó los célebres huevos imperiales, elaborados en oro y piedras preciosas, hoy altamente valorados.

La pieza presuntamente robada es una edición especial de Fabergé inspirada en la película de James Bond Octopussy (1983).

“El Special Edition Guilloché Enamel Octopussy Surprise Locket fue elaborado en oro amarillo de 18 quilates. Está decorado con esmalte guilloché verde e incrustado con 60 diamantes blancos y 15 zafiros azules. El exterior del huevo sigue fielmente el diseño del huevo Fabergé que aparece en la película Octopussy, con una preciosa estructura de celosía (NdR: diseño ornamental) de oro de 18 quilates delicadamente incrustada con zafiros azules y diamantes blancos en un diseño floral”, dice la descripción oficial de Fabergé.

“Al más puro estilo Fabergé, el precioso medallón en forma de huevo también ofrece una sorpresa: al abrirlo, revela un pulpo en miniatura de oro de 18 quilates en su interior, que captura el espíritu de la película que le da nombre. El pulpo tiene dos ojos de diamantes negros”, se informa en la misma descripción.

En la película de 007, el agente espía James Bond se enfrenta a una organización criminal dirigida por una mujer apodada “Octopussy”, cuyo emblema es un pulpo.

Con información de EFE, AFP Y AP